Corsair ha renovado uno de sus mejores ratones, el M60, con el modelo superior, M65 con diversas mejoras visibles; su cuerpo de aluminio lo dota de una robustez que encontraremos en muy pocos ratones, ya que la mayoría apuesta por el plástico. Se recubre con una superficie engomada para maximizar el agarre. EL sensor láser ha sido mejorado con un Avago ADNS-9800 que ofrece una resolución de 8.200 DPI; mantiene el botón francotirador para modificar de forma instantánea la resolución y el sistema de pesos regulable, con un tiempo de respuesta de 1 ms y una vida útil de 20 millones de clics.

Producto cedido por Corsair

Especificaciones del producto

Presentación y vista en detalle

Aparte del ratón y el sistema de pesos, se acompaña un pequeño manual rápido de uso; el controlador para el panel de control lo descargaremos desde la web. Dicho software también actualizará el firmware de manera automática.

Estamos ante un modelo cableado, conexión USB y cable mallado de 2 metros, longitud de sobra. El diseño es espectacular, un cuerpo de aluminio que aporta robustez y un peso algo alto para los que vengan de modelos de solo plástico. Y diseño solo para diestros, punto negativo.

Los laterales siguen siendo rugosos para un mejor agarre; Corsair mantiene así la distribución de botones del M60; dos botones laterales programables y el botón "francotirador" que por defecto aumenta la sensibilidad DPI para movimientos y acciones más precisos. Recordemos que podemos cambiar la función de todos los botones al ser programables en su totalidad.

Vista en detalle (Cont.)

El lateral no derecho es totalmente liso, de ahí su diseño asimétrico solo apto para diestros. Otra de la mejoras de este nuevo modelo es el tiempo de vida útil tasado en 20 millones de clics, un equivalente a pulsar 10 000 veces los botones diariamente durante más de 5 años.

La rueda de desplazamiento está fabricada en aluminio con un recubrimiento de goma que facilita el agarre y su uso. La botonera central permite cambiar al vuelo la resolución con un indicador LED en el centro.

5 patas de teflón facilitan el deslizamiento, además de encontrar el sensor láser Avago ADNS-9800 de 8.200 DPI. El sistema de pesos que, al quitar el tornillo, podemos liberar la pesa para equilibrar el ratón a nuestro gusto.

Podremos usar el ratón sin necesidad de instalar ningún controlador aunque para las funciones avanzadas, sí deberemos descargar e instalar el software desde la web del fabricante.

Software y configuración

El panel de control se Corsair se encuentra totalmente en español, una ventaja para algunos usuarios. La aplicación dispone de tres pestañas de configuración, con la asignación de perfiles y botones en la primera pestaña. Desde esta pestaña también podemos activar o desactivar la iluminación externa del ratón. Aparte de esto, podemos crear macros y asignarlas a un botón.

La segunda pestaña se hace cargo del rendimiento del ratón, configuración de la resolución en DPI, configurar el refresco o tiempo de respuesta y probar el ratón según la superficie que usemos.

Por último, todo lo que hemos ido configurando puede ser guardado bien en el ratón o incluso en un fichero; al disponer el ratón de memoria interna, seremos capaces de poder guardar todos los perfiles en el ratón y poder usarlo en cualquier equipo.

Pruebas realizadas

Para probar el Vengeance M65 de Corsair hemos estado jugando a dos títulos shooter en estado puro (para lo que está enfocado este ratón), Borderlands 2 y Battlefield 3. El ratón responde bien y es relativamente cómodo por su compacto tamaño; para algunos podrá ser pequeño pero la mayoría es cuestión de unas horas hacerse a su tamaño; las patas de teflón deslizan bien y en general la forma es bastante ergonómica.

Es destacabke la calidad de fabricación del ratón, simplemente soberbia, con el cuerpo de aluminio que le da un peso extra y gran robustez. El botón exclusivo de francotirador hace que disminuya precipitadamente la resolución, por lo que puede llegar a ser útil; en el caso de los usuarios que no lo necesiten, este botón (afortunadamente) se puede reprogramar y asignar otras funciones. En términos generales, estamos ante un ratón con un deslizamiento excelente, gran agarre, buen peso y con un sensibilidad de 8.200 DPI suficiente para adaptarse a cualquier usuario y entorno.

Conclusión

El primogénito M60 ha sido mejorado hasta nacer en el M65, con un sensor de nueva generación que ofrece 8.200 DPI. Se mantiene el cuerpo de aluminio que le da un peso mayor y una sensación total de robustez, con un diseño espectacular y esa iluminación externa en azul que, hay que decirlo, no es para nada molesta y puede ser desactivada mediante el panel de control de Corsair. Este panel de control es indispensable para sacarle el máximo partido al ratón, programar botones, crear macros y asignarlas, configurar superficie de uso del ratón, refresco, etc. En cuanto al rendimiento, sin peros, deslizamiento suave, excelente precisión a bajas DPI y todo un lujo poder jugar con este modelo.

El Vengeance M65 de Corsair mejora a su antecesor, más resolución, disponible en 3 colores y un software de configuración excelente.

Valoración: 4.9/5

Producto cedido por Corsair