El producto nos viene en una de las cajas típicas de la marca. De cartón poco resistente, pero con almohadillas que aseguraran el viaje del bloque.

Dentro nos encontramos con el bloque, los racores rápidos de rosca 1/8G y una bolsa de gominolas. Sí, habéis leído bien: gominolas.

Lo primero que nos sorprende al cogerlo son dos cosas. La primera, su peso, 680g. Una barbaridad, aunque su tamaño también impresiona.

La segunda, su extraordinario acabado. Aluminio perfectamente pulido y anodizado de color azul uniforme. Aunque en la foto aparezcan varios tonos de azul.

La diferencia respecto a su antecesor es básicamente estética. En cuanto al circuito interno, no podemos saberlo ya que el bloque es de una pieza.

Incluye además una chapita bellamente labrada con el emblema de la marca y el modelo del bloque.

Esta cara es la que estará en contacto con nuestro HDD, y está perfectamente pulida.

Los racores, de tipo rápido y para tubo de 8mm de interior.

Este tipo de racores es muy seguro, a costa de no permitir un diámetro interior grande.

Podemos usar incluso tubos de silicona, aunque el PVC y materiales más rígidos, entran mejor en estos racores.

Aconsejamos montarlo todo fuera de la caja y después meter el HDD, ya que es bastante engorroso poner los racores una vez dentro

Paradójicamente la parte que toca el bloque no es para nada lisa. La parte superior sí; presenta más superficie útil.

Utilizaremos los orificios de la parte inferior para colocar el bloque.

Usaremos unos tornillos adecuados ya que podemos pasar de rosca enseguida estas tuercas.

A la izquierda, cerca del racor podemos ver un hueco con un tornillo. Esta pensado para añadirle la opción de sonda para la temperatura que nos ofrece Innovatek.

La suma del peso de nuestro HDD y del bloque supera de lejos el kilogramo. Solo verlo ya nos da esa sensación.