Los dispositivos de red conocidos como NAS están tomando gran importancia en los últimos tiempos por su gran evolución hacia sistemas fáciles de configurar y usar. La última apuesta de QNAP es el HS-210, un NAS enfocado al uso en salón por su diseño plano y sin ventilación activa; pensado para discos NAS WD Red y Seagate, este NAS ofrece su potente sistema operativo QTS 4.1, dos bahías para discos duros y un abanico prácticamente ilimitado de aplicaciones y funciones.

Producto cedido por QNAP

Especificaciones del producto

Presentación y vista en detalle

Con el dispositivo se acompaña fuente de alimentación externa, cable de red, tornillería para instalación de discos y manual de inicio. Todo ello sin controlador o CD alguno; toda la instalación se puede hacer vía Internet o descargando los ficheros correspondientes previamente desde la web del fabricante.

Como ya comentábamos, se ha optado por un diseño acorde a reproductores típicos multimedia, sin incluir ningún ventilador, de modo que la refrigeración se da a través de la estructura de aluminio del NAS.

La tapa delantera tiene un agarre magnético central que, si la quitamos, da aceso a las dos bahías para discos duros. Dichas bahías son de metal y ayudarán a la disipación de calor generada por los discos. Si escogemos unidades de 2,5" (sean o no SSD) mejoraremos tanto en sonoridad como en consumo eléctrico.

En la parte trasera se encuentran todas las conexiones, corriente eléctrico, dos puertos USB 2.0 y otros dos USB 3.0, puerto RJ-45 de Red Gigalan y lector de tarjetas SD. Los puertos USB tienen varias utilidades como por ejemplo para servidores de impresión, copia a dispositivos externos, etc.

Para probar el HS-210 hemos optado por los discos recomendados para este modelo, dos unidades WD NASware de 2,5 pulgadas con una capacidad de 1 TB cada uno. Esto mejorará el consumo de nuestro equipo y aprovechamos las tecnologías de estos discos, ya que están enfocados al uso en dispositivos de almacenaje en red.

QNAP Finder

Vamos a seguir el manual de instrucción del fabricante; una instalación que ha sido simplificada al máximo y que nos evite el uso de discos de instalación. Accedemos a la web start.qnap.com para seleccionar nuestro modelo y que la propia web nos dará 3 pasos, configurar hardware, instalar firmware e iniciar sesión.

Para la instalación del firmware o sistema operativo podemos uar dos métodos, instalación en la nube o local. Escogemos el segundo método para evitar un registro falso en la web de QNAP, al ser una muestra. Para la instalación en la Nube, necesitamos el código Cloud Key que viene en la hoja de instalación del NAS.

Para nuestra instalación el local descargamos QNAP Finder, un software que encontrará en NAS en nuestra LAN y a continuación podremos iniciar el dispositivo. Se mostrará el NAS que detecte y arrancará el asistente fácil, el cual aconsejamos a los iniciados en el mundo de los NAS.

La configuración rápida nos pedirá un nombre para nuestro NAS y una contraseña para el admin. Hecho esto, el asistente descargará, instalará y configurará el sistema operativo QTS 4.1. Como podemos observar, no es necesario ningún conocimiento específico, solo seguir las indicaciones del asistente.

Finalizado el asistente, ya podemos acceder vía web a la interfaz de QTS 4.1, un sistema sumamente versátil y sencillo de usar. El asistente carga automáticamente la página de inicio.

Sería imposible probar todas y cada una de las características de este NAS, de modo que enfocaremos en un uso básico y rendimiento general del NAS.

QTS 4.1, primeros pasos

El entorno del sistema operativo QTS 4.1 es minimalista, estilo escritorio con accesos directos a las aplicaciones más relevantes y en las que van enfocada este modelo, al entretenimiento multimedia. Disponemos incluso de un botón de inicio arriba a la izquierda para lanzar aplicaciones o acceder al penal de control, usuarios, discos, etc y el APP Center, un centro donde encontraremos otras aplicaciones igualmente interesantes.

Una de las novedades es que podremos minimizar y mover todas las ventanas, a modo escritorio, omo la mayoría de usuarios está acostumbrados a usar un PC. El asistente inicial configura dos discos en modo RAID 1; podemos ver que la sincronización de los discos llevará tiempo, incluso estando vacíos. La elección del sistema RAID se basará en lo que busquemos principalmente, espacio en disco (RAID 0), o copias de seguridad (RAID 1).

Como norma general, lo primero que debemos hacer es la configuración de usuarios. El que viene por defecto conviene dejarlo para tareas administrivas y añadir cuantos usuarios vayan a usar el NAS. Incluso podemos crear una cuenta de invitado o permitir el acceso a ciertas carpetas compartidas de carácter público. Al crear el usuario, podemos darle ya directamente permisos a ciertos accesos, incluirlo en un grupo de usuario en concreto y establecer privilegios de aplicaciones. Esto creará además una carpeta personal con el nombre del usuario, concretamente en la ruta /homes.

Otro aspecto importante es la gestión de carpetas compartidas y la posibilidad de activar Windows ACL, el gestor de diretivas en caso de querer un control más exhaustivo en cuanto a permisos de lectura/esritura/acceso.

Para un entorno más profesional, este NAS ofrece soporte para autentificación en dominios Active Directory y LDAP, de modo que podremos usarlo también en entornos empresariales y de negocio.

Configuración de servicios

Importante habilitar el Servicio NFS para poder ver los recursos compartidos en nuestra LAN. Una vez hecho esto, podemos acceder a la unidad de red con nuestro usuario creado y tener acceso a todo el directorio donde tengamos permisos. En este caso, el usuario "David" está en el grupo "administradores" de modo que tiene acceso incluso a las papeleras de reciclaje de cada directorio (una característica que podremos incluso deshabilitar y eliminar esa opción de reciclaje).

Servicios de Red por defecto, FTP, Telnet/SSH, SNMP, UpnP y Bonjur y la famosa papelera de reciclaje de red son en muchos casos muy útiles para acceder vía FTP para subir o bajar ficheros al NAS. Directamente tenemos acceso vía FTP y con nuestro usuario hacemos login sin problema, al igual que desde el explorador de ficheros, pero con un sistema de colas a la hora de subir y bajar mucho más eficiente.

QSync es uno de los puntos fuertes de QNAP, una aplicación para sincronizar archivos desde cualquier disposi tivo compatible y en cualquier lugar. Podemos también sincronizar a través de internet en un PC cualquiera.

El servidor DLNA hace posible que podamos reproducir desde un dispositivo compatible con esta tecnología cualquier fichero de la biblioteca de medios que gestiona el NAS. Desde una TV con interfaz de red, hasta un repro ductor multimedia o un software desde PC, podremos reproducir cualquier fichero y que, gracias a la red Gigalan, podremos tener varios streamings en Full HD sin problema alguno.

Entramos en el apartado de las aplicaciones ociosas. Entre ellas tenemos habilitados los servicios multimedia para música, fotos, ficheros y vídeos. Todos estos servicios podrán arrancar desde un navegador y tener todo a la mano, desde cualquier ordenador o dispositivo como tablets o smarphones.

Servicios multimedia y rendimiento

El Backup Manager es otro servicio fundamental si pretendemos usar el NAS como dispositivo de seguridad en cuanto a integridad de nuestros datos. Tenemos varias formas de realizar dicha copia, desde servidores Rsync o RTRR, pasando por una replicación remota a otro NAS, en la Nube como Amazon S3, ElephantDrive (sporte para Google Drive Sync en la App Center).

Saliendo del mero ocio, existen servicios ya instalados muy útiles en entornos profesionales o de la pyme, como servidor web (php), LDAP, MySQL, RADIUS para conexiones seguras WiFi o VPN. Con el paquete phpMyAdmin tendríamos lo necesario para tener nuestra propia web alojada en el QNAP.

Como soluciones de negocio, la APP Center de QNAP ofrece paquetes como Joomla, Drupal, Wordpress y una relación de comercio electrónico y herramientas para la Pyme sumamente útiles y todas ellas libres.

Para tener una idea del rendimiento general del HS-210, hemos realizado una subida de ficheros al NAS desde un PC de sobremesa, todo ello en una red Gigalan. Hemos pasado diversos ficheros vía explorador al NAS, con un resultado en torno a unos 44 MB/s.

Misma prueba pero esta vez vía FTP, el mismo procedimiento, con unos valores cercanos en torno a los 40 MB/s. Esto nos asegura un perfecto streaming de vídeo en alta definición, incluso varios streaming simultáneos.

Conclusión

QNAP ha conseguido un NAS que se puede acercar a lo que podría ser el futuro inmediato del entretenimiento multimedia y que podría desbancar a reproductores multimedia o HTPC. Es un dispositivo que une ocio y trabajo en un único dispositivo, con un sistema sin ventiladores y una sonoridad increíblemente baja (la que den los discos instalados). El rendimiento general en red no está nada mal pero es bajo si los comparamos con otros modelos del mercado, aunque esta pérdida de rendimiento se gana en consumo, algo a tener muy en cuenta pues será un aparato que rara vez se encuentre apagado. Las posibilidades de servicios son insuperables; podemos tener montado un servidor del tipo que sea en cuestión de minutos, con una documentación abundante y de gran calidad en español. Si se hubiese incluido un conector HDMI para reproducción directa a una TV o monitor, estaríamos antes el NAS perfecto para muchos de nosotros.

El QNAP HS-210 ofrece un diseño cuidado y que se aleja del NAS convencional, silencioso y de muy bajo consumo, con una instalación y configuración fáciles y sin complicaciones.

Valoración: 4.8/5

Producto cedido por QNAP