<center><table width="100%" border="0" cellpadding="10"><tr><td width="250"></td><td><p align="justify">Ante la creciente popularidad de los juegos en línea, los cibercriminales han encontrado un nuevo objetivo para introducir software malicioso. El más común aparece en forma de troyanos o puertas traseras, junto con ataques de la familia de gusanos “Autorun”. El negocio del robo de cuentas para su posterior venta en el mercado clandestino también es floreciente, según demuestra el análisis de la compañía G.Data.



Así, hay que cuidarse especialmente de los sitios web pirateados, páginas falsas donde se solicita la introducción de datos de acceso e, incluso, servicios P2P.


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